lunes, 9 de julio de 2012

Genero Lirico

 Para la amistad:

En un momento inesperado te conocí,
Después de tanto esperar a ese verdadero amigo te encontré...
Sin dudar en algún momento te auxilié,
Queriendo tu felicidad te alenté...
Si en algún momento te fallé te pido perdón.
Pero quiero que sepas que te quiero un montón.
Eres mi mejor amiga y nada ni nadie lo cambiará...
Un mejor amigo es dificil de encontrar y es buena suerte tener uno...
Sabes que conmigo puedes contar y nunca te voy a fallar... te quiero por lo que eres...
Una amiga especial.

Para el amor:

Pequeña
rosa,
rosa pequeña,
a veces,      
diminuta y desnuda,
parece
que en una mano mía
cabes,
que así voy a cerrarte
y a llevarte a mi boca,
pero      
de pronto
mis pies tocan tus pies y mi boca tus labios,
has crecido,
suben tus hombros como dos colinas,
tus pechos se pasean por mi pecho,
mi brazo alcanza apenas a rodear la delgada
línea de luna nueva que tiene tu cintura:
en el amor como agua de mar te has desatado:
mido apenas los ojos más extensos del cielo
y me inclino a tu boca para besar la tierra.        

A veces creo que te olvido, y no sé si te olvido en realidad, o es tanto lo que este sentimiento me abruma en esta mi soledad. Por que aun cierro los ojos y te veo a mi lado, aun cierro los ojos y vuelvo a vibrar, al sentirme abrazada a ti, al sentir que nada puede salir mal.
A veces creo que te olvido, pero a mi alma se le olvida olvidar. Por que aun ruego un minuto de tu vida, el sentimiento me traiciona y termino por llorar. Y dicen que no tengo remedio y en realidad no sé si es verdad, solo sé que busco una salida y no la puedo encontrar.
A veces creo que te olvido y apareces justo frente a mí, y no sé si empiezo a odiar el primer día que te vi o a maldecir el día que te perdí y te fuiste de mí.
A veces creo que te olvido y me parece que tú lo haces también, si es así no me olvides por completo, si es así piénsalo bien. No quisiera creer que te niegas a ti mismo que algo tan bello pudo pasar, pues me duele en el alma saber que desearías mejor poderme odiar.
A veces creo que te olvido y termino por creer que estoy ligada a ti, de algún modo, y pienso que no es tan malo pues aun no te puedo olvidar; ¿Y sí tu también estas ligado a mí? No puede ser tan malo pues recuerda que somos “lo mejor de lo peor que nos ha pasado”.
A veces creo que te olvido y sabes, mi ser grita cuanto te amo y me pide que lo esconda, pero me exige que no me lo niegue. Y vuelvo a preguntarme si aun sientes lo mismo que yo. Y vuelvo a desear que llegues y añorar lo que ya paso. 

El verano llega con tanta fuerza

que desintegra las nubes 

y la siega despoja al secano de la vida.

Las ontinas, 

el orégano

el hipérico,

junto a la miel en rama

intentan perfumar 

-a modo de incienso-

el olvido de los pájaros .

Las cerezas tiemblan.






Como el sol y la luna, que viven enamorados, desde los inicios de la historia, así lo estoy yo de ti, pero hoy fue un día tan especial, que no puedo dejar de escribirlo. Hoy me sentí otra vez en tus brazos, disfruté de tus labios, esos labios que no son míos; si eres un hombre prohibido.

Pero dicen que lo prohibido es lo divertido y si, ¡es cierto! Pues yo disfruto cada momento cerca de ti, sentir tu aliento, tu piel y hoy sé que no te soy indiferente, pues hoy me dijiste que disfrutas de mí en la intimidad, esa intimidad que se da a cuenta gotas, pero que deja una huella tan profunda en mi ser, tal es así, que en este momento sólo pienso en el siguiente encuentro que tendré contigo.

Me siento como una adolecente, que espera con ansias el siguiente encuentro, pero el nuestro en un cuarto de hotel.  Donde nos entregamos sin pensar en nada más que disfrutar nuestro momento, pues al cerrar la puerta queda afuera nuestro pasado, presente y futuro, sólo por disfrutar un instante de entrega, rebasando todos los límites, viviendo nuestro propio presente aún sin saber si tendrá futuro, pero eso que importa, si al tocarme, besarme y hacerme tuya no importa nada más, nada más, sólo tú y yo. Ese tú y yo que a cada paso escribo en esquinas, rincones y en mi corazón, que hoy late por ti, y repite a cada latido tu nombre. Tuya por siempre, porque siempre estarás en mi corazón y mente.







 



















































             

martes, 3 de julio de 2012

Tenle mas miedo a la vida muerta que a la muerte


silencio.jpgMiedo.
Muchas personas sienten miedo, miedo a perder, miedo a decepcionar, miedo a fallar, miedo a continuar, miedo a la vida.
Muchos dicen, más miedo se le tiene a los vivos que a los muertos, estoy muy de acuerdo con eso, ahora yo pienso también en algo, más miedo hay que tenerle a la vida muerta que a la muerte.
El miedo, es un sentimiento que recorre por todo el cuerpo, pero todo empieza por la cabeza que se imagina cosas y luego la imaginación se encarga del resto, con esto me refiero a que la imaginación puedo hacer miles de cosas que no son reales.
Por último, aprender a no tenerle miedo a las cosas es como madurar, porque ya no serás más un niño que se imagina cosas a su alrededor, ya no serás mas un niño que crea cosas en su cabeza y que se imagina seres extraños, ya no serás mas un niño que llama a su mama para que lo ayude.

Los poemas

Aqui hay algunos de los poemas que mas me gustaron:

-Enamora con cartas de amor, poemas de amor y amistad, entre otros, divididos en categorías, tanto si estás enamorada, como si estás triste por tener que decir adiós y tienes la esperanza de que vuelva a ti, disfruta los poemas.

-Tengo hambre de ti, de tu presencia, de tu fragancia, de tu poder; hambre que duele, que debilita, que desespera, por ti. 

-La tierra es dulce cual humano labio, como era dulce cuando te tenía.

-Habré de levantar la vasta vida  que aún ahora es tu espejo: cada mañana habré de reconstruirla. Desde que te alejaste,  cuántos lugares se han tornado vanos  y sin sentido, iguales  a luces en el día.  Tardes que fueron nicho de tu imagen,  músicas en que siempre me aguardabas,  palabras de aquel tiempo,  yo tendré que quebrarlas con mis manos.  ¿En qué hondonada esconderé mi alma  para que no vea tu ausencia  que como un sol terrible, sin ocaso,  brilla definitiva y despiadada?  Tu ausencia me rodea  como la cuerda a la garganta,  el mar al que se hunde.